Hay ue atentos con la redundancia en el respaldo y la recuperación ante desastres. Lo que las personas y empresas piden de los servicios de plataforma en la nube está cambiando. Los adoptantes de la nube pura temen el bloqueo de los proveedores y cada vez vemos que las organizaciones extienden el riesgo al utilizar multi-nube, ofrecida por distintos proveedores.

De hecho más de la mitad (58%) de las empresas que actualmente usan un proveedor de servicios en la nube planean expandir su cartera a través de múltiples plataformas en la nube. Esto les brinda la mayor oportunidad de ofrecer las mejores y más receptivas experiencias del cliente.

Mientras tanto, aquellas que ejecutan un modelo de nube híbrida tienen la opción de operar sus cargas de trabajo más críticas en las instalaciones y usar plataformas en la nube para datos transitorios menos sensibles, datos que alimentan aplicaciones orientadas al cliente. Para cubrir sus apuestas, algunas empresas optan por un enfoque híbrido y multi-nube, utilizando sus sitios locales, así como una multitud de entornos en la nube, para garantizar que tengan los mejores resultados de servicio en cualquier circunstancia.

Un marco híbrido y multi-nube puede ser la próxima etapa en la evolución de una organización hacia la nube. Pero plantea un riesgo urgente si la protección de datos y la disponibilidad no se toman en serio.

Problemas en el paraíso

A medida que continúan su migración a la nube, las organizaciones se dan cuenta de que las diferentes cargas de trabajo se adaptan mejor a ciertos entornos de TI. Cuando se usan estratégicamente, estos entornos ofrecen una combinación de mayor velocidad, flexibilidad, agilidad, seguridad de punto final y ahorros cuando las organizaciones tienen visibilidad sobre su estado de TI y prestan mucha atención a asuntos como el uso de la nube.

Una estrategia de múltiples nubes tiene toda la agilidad y escalabilidad de la nube sin depender de un solo proveedor. Ofrece a las empresas la capacidad de mover cargas de trabajo a otras nubes con el fin de la recuperación ante desastres. Mientras tanto, un enfoque híbrido permite a una organización reducir costos inesperados en la nube y personalizar ciertas aplicaciones más allá de lo que es posible en la nube. Es una buena opción para las empresas que desean tomar el control total sobre la disponibilidad de aplicaciones y datos, su protección y la capacidad de tener información que brinde visibilidad de sus operaciones y ayude a garantizar el cumplimiento de las normativas.

Flexibilidad multi-nube

Sin embargo, si las organizaciones no tienen cuidado, esta mayor flexibilidad tiene un precio. Los entornos híbridos y multi-nube son extremadamente complejos: una aplicación puede tener sus niveles que residen en múltiples nubes diferentes o centros de datos físicos. Esta complejidad solo aumenta con la cantidad de entornos y aplicaciones que tienen las empresas. Un entorno de datos altamente complejo y fragmentado es difícil de monitorear y controlar, proporcionando muchos puntos para fallas e intrusiones.

Las empresas corren el riesgo de fragmentar sus estrategias y conjuntos de herramientas de administración de TI si no utilizan soluciones que puedan operar en entornos híbridos, lo que resulta en numerosas políticas superpuestas y contradictorias. Sin un enfoque unificado para la gestión y protección de datos, las empresas pueden encontrar inconsistencias no solo en las herramientas que usan, sino también en sus políticas sobre retención de datos, cifrado de datos y, lo más importante, recuperación de sus datos en situaciones críticas.

Entornos híbridos y multi-nube

Los datos son el mayor activo de una organización, y deben gestionarse y protegerse contra pérdidas y malware. En los entornos altamente complejos, híbridos y multi-nube de hoy en día, la necesidad de una administracion, protección y resistencia consistentes y superiores en todos los entornos en todo momento es esencial. La adopción de una plataforma que garantice a las empresas la visibilidad de sus datos, su ubicación, ya sea que estén protegidos, ayuda a mantener servicios comerciales críticos y, a cambio, a su personal y clientes.

Un buen plan de gestión de datos ofrece verdadera tranquilidad. Se trata de garantizar que las empresas tengan confianza y herramientas para garantizar que, cuando algo sale mal, tus datos no se pierdan. Lejos de hacer que sea redundante, la escala y la complejidad de los entornos híbridos y multi-nube del futuro requieren un plan de protección de datos sólido que solo puede hacerse posible mediante el uso de una única herramienta que pueda abarcar todos sus entornos.