La organización de los discos duros de un servidor puede adquirir diversos niveles de complejidad. Cada tipo de combinación de discos duros se denomina Raid. En un principio apenas un puñado de combinaciones eran posibles, denominándose Raid 0,1, etc. A medida que nuevas combinaciones fueron surgiendo también fueron denominándose con números a pesar de ser completamente diferentes de los formatos originales.

El objetivo de organizar los discos duros en Raid es lograr la redundancia de datos. De esta manera la información que era almacenada en distintos discos duros, que previene que la caída de uno de los discos del servidor no genere la caída total del mismo, de modo que pueda seguir cumpliendo sus funciones normalmente aún con un disco operativo menos.

Existen distintos niveles de Raid. En el nivel cero los datos se separan en pequeñas porciones y se distribuyen entre los discos. Queda claro que con esta organización lógica no hay tolerancia a fallos de los discos, pues no hay una redundancia, de forma tal que es necesario que todos ellos funcionen para acceder a la totalidad de la información. La ventaja de esta organización de Raid es acelerar los tiempos de acceso, pues puede leerse simultáneamente varias partes del mismo archivo, ya que están localizadas en distintos discos.

El Raid de nivel 1 constituye un salto en la calidad de la organización lógica pues su disposición  de “espejo” hace que siempre tenga una copia de la información, de esta manera asegurando el funcionamiento ante una falla. Aunque se pierde rapidez, el servidor no deja de funcionar.

El nivel de Raid 2 no es muy usado actualmente, refiriéndose otras disposiciones como el nivel 3. En este nivel se trabaja dividiendo la información como en el nivel cero, pero a la vez conservando un disco de ayuda a mantener la integridad del sistema ante casos de fallas.

Seguiremos refiriéndonos a la organización del Raid del servidor para comprender cómo recuperar los datos en casos de fallos en su discos duros.