La Unión Europea y el Reino Unido, a través del Reglamento General de Protección de Datos (RGPD), requieren que las páginas web muestren una notificación para que los usuarios den su consentimiento informado sobre la recopilación y el uso de sus datos. Para ello, cada vez que un usuario visita un nuevo sitio web, se le presenta varios avisos de cookies.

Avisos de cookies: No siempre son trasparentes

Un nuevo estudio realizado por científicos del Instituto Max Planck de Seguridad y Privacidad, descubrió que el lenguaje utilizado por los avisos de privacidad a menudo explota los sesgos cognitivos de los usuarios y no proporciona la información que éstos consideran importante.

Para comprender las percepciones los científicos realizaron entrevistas semiestructuradas a usuarios europeos de la Web. Siempre preguntando sobre la relación de los usuarios y los fines de la recogida de datos y los avisos de cookies. Al principio de las entrevistas, la mayoría de los participantes afirmaron que los avisos de privacidad les resultaban “molestos” e intentaban deshacerse de ellos rápidamente.

Durante el estudio, se les pidió que repasaran detalladamente varios ejemplos de avisos de privacidad. Un descubrimiento desconcertante es que, al final de la entrevista, ninguno de los participantes se sentía bien informado sobre las prácticas de datos en línea.

Las principales conclusiones de este estudio destacan la falta de transparencia en las descripciones de finalidad, por ejemplo:

• Los usuarios expresaron su deseo de ver información sobre cuánto tiempo se almacenan sus datos y cómo solicitar que se eliminen.
• La mayoría de los participantes expresaron su convicción de que las organizaciones seguirían encontrando formas de recopilar su información. La mayoría añadió que estaban seguros de que lo seguirían haciendo luego de que ellos se negaran explícitamente a compartir sus datos.

Esta preocupación se repitió en circunstancias en las que los avisos de privacidad afirmaban que algunos servicios no estarían disponibles para los usuarios a menos que dieran acceso a sus datos. Algunos participantes querían saber más sobre los servicios que se perderían. Hubo otros que afirmaron sentirse amenazados por tales mensajes, y algunos afirmaron sentirse “manipulados” para compartir sus datos de esta forma.

El lenguaje utilizado en los avisos de privacidad suele ser poco claro para los usuarios

Al preguntar sobre el lenguaje utilizado por las empresas para explicar los fines de la recogida de datos, el estudio revela una falta de conocimiento de los usuarios sobre el significado de algunos términos. Por ejemplo, los participantes no consideraban que hubiera diferencia entre la finalidad denominada “Publicidad” (que se centra en ofrecer anuncios genéricos) y la denominada “Publicidad personalizada” (que ofrece anuncios dirigidos). Además, los participantes declararon que no se sentían cómodos compartiendo sus datos con fines publicitarios.

Este estudio propone varias soluciones a los problemas descubiertos. Para compensar la falta de interacción con los avisos de cookies y de privacidad, se podría proporcionar a los usuarios una “etiqueta nutricional de consentimiento”.

Utilizando un mejor diseño de la interfaz de usuario, iconos y colores en los avisos de privacidad, las empresas podrían hacer que el proceso de búsqueda de información fuera más accesible y llevara menos tiempo a los usuarios. La idea es buscar una manera en que la información sobre el tratamiento y procesamiento de datos sea más clara para los usuarios. Una posibilidad es inspirarse en campos más establecidos que utilizan formularios de consentimiento informado, como la investigación con seres humanos o la atención sanitaria.