A medida que avanza la tecnología, y la miniaturización de los dispositivos se hace cada vez más tangible, es palpable un futuro con dispositivos de almacenamiento de menor tamaño físico y mayor capacidad de almacenamiento ¿Dónde estará el límite?

Partamos de la base de que, hoy por hoy, es común ver teléfonos móviles con procesadores de cuatro núcleos, que parecen querer competir en rendimiento con los procesadores de otros equipos más grandes. Semejante capacidad de procesamiento requiere, justamente, cada vez más capacidad de almacenamiento en espacio más reducido. Es así que la memoria flash se abre camino en casi todos los dispositivos tecnológicos que nos rodean hoy día. Se estima que el mercado de la memoria flash para dispositivos móviles alcanza los 22,000 millones de dólares por año a nivel global, y también se ha registrado un incremento en lo que se gasta en discos duros de estado sólido para ordenadores y servidores, que ya ocupan una cuota del mercado superior al 20%.

Muchas de las desventajas que en el pasado se le achacaban a la memoria flash, como la labilidad de los contenidos grabados sujetos a cambios electromagnéticos, y la limitación de su capacidad, se están superando y convirtiendo a los dispositivos de memoria flash en el futuro del almacenamiento.

Si bien la tecnología flash cuenta con enormes ventajas comparativas en cuanto a rendimiento, tamaño, consumo y tolerancia a impactos respecto a los discos duros duros tradicionales, el costo sigue siendo el punto débil. Almacenar la misma cantidad información en un dispositivo flash costaba de cinco a 10 veces más que hacerlo en un disco duro tradicional. Sin embargo el año 2012 marcó una inflexión en este aspecto, estimulando a muchas empresas a crear almacenamientos con tecnología flash para reemplazar los discos duros tradicionales.

Hitachi es una empresa pionera en el desarrollo de la memoria de estado sólido, y se encuentra actualmente trabajando en productos con mayores niveles de resistencia, escalables según la necesidad de la empresa, y mucho más adaptables a la vida empresarial, que puede llegar a desplazar para siempre los discos duros tal y como los conocemos. Esta tecnología llamada Hitachi Accelerated Flash está lejos de alcanzar su techo. Será cuestión de esperar para ver lo que nos depara el futuro en cuanto a este tema.