El punto más difícil de ser propietario de una Mac es cuando crees que los nuevos modelos están en camino mientras luchas con un sistema antiguo más lento. Con los tres modelos iniciales de Mac de Apple M1 con casi cinco meses de antigüedad, existe la esperanza de que las actualizaciones adicionales -potencialmente incluso más rápidas que los primeros Mac M1- podrían aparecer tan pronto como en abril, aunque podrían no salir hasta el otoño. Por eso mismo no es mala idea pensar en adquirir un SSD para Mac, y así potenciar la velocidad del portátil.

No todos tendremos el presupuesto necesario para actualizarnos cuando aparezcan, pero aún así podríamos sentirnos celosos de la velocidad. Si tienes una Mac que utiliza una unidad Fusion -o, incluso más lento, una unidad de disco duro- como volumen de arranque, hay una forma de añadirle velocidad, y la mejora puede sorprenderte.

¿Qué puedo hacer para que mi portátil funcione mejor?

Desde hace unas cuantas versiones de macOS, Apple ha mejorado la gestión y el uso de la memoria RAM, lo que se traduce en un menor intercambio de software activo a una unidad y viceversa, lo que ralentiza especialmente a las Mac con discos duros. Si tienes una que permite actualizar fácilmente la RAM, ese es un punto de partida para conseguir un aumento de velocidad. Los precios de las memorias RAM siguen siendo bajos en relación con el valor proporcionado: 100 o 200 dólares podrían proporcionar un buen impulso.

Sin embargo, la mayor mejora que puedes hacer para ver mejoras dramáticas es cambiar tu volumen de arranque de un disco duro o unidad Fusion a un SSD. Si tienes un Mac que permite la sustitución (fácil o difícil de hacer) de tu unidad interna por una SSD, quizás ya hayas hecho esta actualización.

Dado que la mayoría de los portátiles Mac no permiten una actualización de la unidad con facilidad (o, en el caso de un iMac, requieren un enorme y cuidadoso esfuerzo para cambiar la unidad), considera la posibilidad de utilizar un SSD externo para Mac, que se conecte a través de USB 3 o Thunderbolt 3. Las velocidades de datos de cualquiera de los dos estándares son lo suficientemente rápidas con un SSD como para ofrecer una mejora significativa. Además, el coste de las unidades SSD de 1 TB ha bajado lo suficiente como para que sea buena idea considerarlas, En lugar de cambiar el ordenador por completo. Por entre 200 y 300 dólares, puedes comprar un disco de estado sólido de alto rendimiento y con buenas críticas que aumentará tu velocidad, a veces por un factor tan alto que puede parecer un Mac nuevo.

Estas son las instrucciones para configurar un SSD externo como unidad de arranque. Esto sólo se aplica a los Macs de Intel. Todos los Macs basados en M1 vienen con almacenamiento sólo en SSD.

¿Cómo configuro mi SSD para Mac?

Para cambiar a una unidad SSD, debe comenzar con estos pasos:

• Conecta tu nuevo SSD para Mac.
• Inicia la Utilidad de Discos y selecciona Ver > Mostrar todos los dispositivos.
• Selecciona la unidad en la lista de la izquierda y haz clic en Borrar. (Si no ve la lista, elige Ver > Mostrar barra lateral).
• Elige formatear como APFS con el mapa de partición GUID. Sigue las indicaciones.
• APFS está optimizada para los SSD, y es raro que una unidad que compres ya esté configurada con ese sistema de archivos.